Florentino Pérez.

Carta de servicios: Evito la quiebra de Real Madrid como entidad sin fines de lucro en 2000, y resguardo al equipo español de convertirse en una sociedad Anónima. Su primera movida, entonces, fue saldar una deuda que excedía los 400 millones de euros. Y sanar un desborde jurídico.

Electo por los socios, llegó, fichó y ganó. Con él, los mejores del mundo jugaron en el Santiago Bernabeu. Y con él, Real Madrid disparo de ser un equipo europeo, aun conjunto mundial. Con él La Marca Real Madrid, tomo el carácter de Registrada en el universo Entero. La contraseña de su mandato: Los Galacticos.

El Error: En el tiempo, los Zidanes y Pavones, mutaron en Gravesens y Baptistas. Las pretemporadas se tornaron giras Asiáticas, el negocio invadió el terreno de juego, y Real Madrid tomo carácter de empresa, para dejar de ser un equipo de fútbol. Los jugadores fueron salas de marketing con pantalones cortes, y sus camisetas motivos de merchandasin. Sus apellidos un numero mas de Sponsorizacion. Los futbolistas tendían de un hilo de exposición, el carrusel de entrenadores se sucedió sin final, y el vencedor, paso a ser el vencido. El Madridismo confundió competencia con espectáculo. En un primer momento, todo - incluso la imagen - giro alrededor del fútbol. Mas tarde, todo - incluso el fútbol - giro alrededor de la imagen.

FP, amigo de las titulares, guru del periodismo, y bautizado por sus propagandistas como el Obama Blanco. Su experimento confundió un principio primario y salvaje: Fútbol y resultados. Cuando el triunfo no fue una moneda corriente, el proyecto se desmorono.

Entonces, Pérez batió las fronteras de su cargo, y tomo personalidad en el vestuario. Partiendo de un principio bélico, los jugadores profesionales como los soldados, responden a una sola autoridad; cuando el presidente tomo entidad entre los futbolistas, los cargos intermedios perdieron validez y se desgastaron. La armonía de egos en las entrañas del equipo perdió el equilibrio de estabilidad.

Discurso de dimisión a presidente de Real Madrid en 2006: "Soy un tapón que es necesario quitar".
Florentino Pérez, discurso de presentación a candidato en 2009: “Dimitir fue un error”. Esta usted en lo cierto. Primero aceptar el error, y luego redoblar la apuesta. Madrid necesita un tapón, el agua desbordar la bañera. Ahora mismo toma la dimensión de un océano, desdoblado por la marea del fracaso, y las olas de identidad perdida. Cuando se comete un error, el perdón de los demás logra que ese error no haya sido tan grave. Y tres años después, el madridismo parece haber perdonado a Florentino.

El deseado, Florentino Pérez.

El ex presidente promete el cambio, la luna, el sol, la santísima trinidad, y la grandeza perdida en la guerra de Can Barca, "No tengo ningún pacto de no agresión con el Barça. Si tengo que fichar a alguien, lo haré". La última vez que Florentino abrió el saco, y saco una hoja de discurso similar, Luis Figo - entonces en Barcelona - cerraba un contrato de servilleta en las afueras de Cataluña, se tomaba algunas fotos, negociaba su cuenta corriente, y abandonaba Can Barca.

Joan Gaspart, entonces presidente de Barcelona, aun tiene citas con el psicoanálisista, en la intimidad lo tildan de cobarde, el barcelonismo de frívolo, y un freddy vestido de esmoquin lo persigue en sus pesadillas.

Zidane: "Que vuelva Florentino es bueno para el Madrid". Zinedine lo sabe. El francés dice lo piensa, pensando lo que dice, y esta papeleta política le salió de entre el corazón. Pérez regresa, para Real Madrid es el regreso esperado, el deseado. Para el resto de Europa, el regreso a las sombras de la cartera de FP, un hábil negociante.

Mijatovic: "En los negocios Pérez es un ser superior". Aquí en la tierra como en los cielos, el nombre de Dios negociante es Florentino, y su apellido Pérez. Su paraíso, Madrid. Y el infierno...pues quien lo sabe.

Joan Laporta, presidente de Barcelona, reclama (suplica): "Que no intente fichar a nadie del Barça, porque no lo conseguirá". Cuando ya tenemos la respuesta, el ex presidente blanco nos cambia la pregunta. ¿A que le teme tanto Laporta? Fácil, A Florentino. Pérez fichó a todos y cada uno de los mejores del mundo. Ahora mismo, el Barca es el mejor, y los mejores están en Camp Nou. Que habrá dentro de los cajones de Laporta, que revise bajo el colchón, y no pierda de vista sus espaldas, los contratos de Messi, Iniesta, Xavi, y los demás ángeles de Barcelona son inalcanzables para cualquier mortal. Florentino aun no esta seguro a que dimensión pertenece. El expediente Figo esta cerca, siempre muy cerca.

"Lo que mejor se me da son los números y yo confío mucho en mí", manifestó. "¿Que si pagaré 100 millones de euros por un jugador? Estamos en un momento difícil de la economía mundial. Pero hasta ahora, el que más ha pagado por un jugador he sido yo. Desde el 2000, no he visto a nadie que pague lo que yo pagué [80 millones de euros por Zidane a la Juventus]".
Pregunta: ¿Florentino desembolsara mas de 100 millones por un fichaje? Probablemente si.
"Soy muy consciente de las dificultades, tendremos que fichar en un año lo que deberíamos fichar en tres". ¿Dudas? En primer lugar, Pérez es un hombre de palabra.

El verano europeo se avecina y la figura de FP no es una obesidad en vikinis. A la vista, un mercado caluroso, arduo y movidito. El comprador predilecto de mercancías, monto un puesto en Playa Madrid. Y no hay mercader que se resista.